El incremento de las cirugías ambulatorias otorga ventajas para el paciente y una reducción de costos en salud, pero esto implica un adecuado manejo del dolor posoperatorio. Un estudio muestra una mayor duración de la analgesia con el uso de nalbufina versus tramadol, con un buen perfil de seguridad.
La cirugía ambulatoria ha acortado significativamente la hospitalización, acelerando la rotación y reduciendo los costos hospitalarios así como las tasas de infecciones nosocomiales. Sin embargo, la hospitalización más corta y el aumento de la movilidad de los pacientes quirúrgicos han exigido mejorar la eficacia de la anestesia y el manejo perioperatorio.
El dolor posoperatorio es un problema multifactorial que puede resultar en insatisfacción del paciente, retraso en el alta e ingreso hospitalario inesperado después de la cirugía ambulatoria. En el postoperatorio con frecuencia se observa dolor de moderado a intenso durante las primeras 24 a 48 h después de la cirugía ambulatoria. Por tanto, el dolor posoperatorio y las complicaciones derivadas de su tratamiento son consideraciones importantes. Este padecimiento no solo afecta la rehabilitación de los pacientes y prolonga la hospitalización, sino que también puede provocar la progresión del dolor agudo a crónico, que es la principal causa de reingreso después de la cirugía ambulatoria.
Características de la Nalbufina: alternativa para el dolor posoperatorio
Se han utilizado varios fármacos para prolongar la analgesia posoperatoria, como tramadol, ketorolac, dexmedetomidina, ketamina y nalbufina. La nalbufina, un analgésico agonista-antagonista opioide sintético, es principalmente un agonista kappa (κ) y un antagonista parcial de mu (μ). Tiene un mejor perfil de seguridad con menos efectos secundarios en comparación con otros opioides, debido a sus actividades agonistas y antagonistas. La nalbufina ejerce sus efectos analgésicos e hipnóticos a través de su receptor opioide κ, que puede reducir los eventos adversos relacionados con el receptor opioide μ. Numerosos estudios han informado de sus ventajas en el manejo del dolor.
Estudio para medir la eficacia de la Nalbufina
Un estudio multicéntrico, aleatorizado, doble ciego y controlado evaluó la eficacia analgésica y la seguridad del clorhidrato de nalbufina intravenosa, en comparación con el tramadol, para el tratamiento del dolor posoperatorio después de la cirugía ambulatoria.
Características
- El estudio se llevó a cabo en 10 centros y se reclutaron 492 pacientes que presentaban dolor de moderado a intenso después de la cirugía ambulatoria, con una puntuación de la escala visual analógica (EVA) > 3 cm.
- Se dividieron aleatoriamente en un grupo experimental (n: 248) y un grupo control (n: 244) y el manejo de la analgesia se realizó con 0,2 mg/kg de nalbufina o 2 mg/kg de tramadol, respectivamente.
- Las puntuaciones de la EVA, los eventos adversos y los signos vitales de los pacientes se registraron antes de la administración y 30 min, 2 h, 4 h y 6 h después de la administración de analgesia.
- Se utilizó una disminución de la intensidad del dolor de más del 25% en comparación con el valor inicial como indicador de la eficacia analgésica.
Resultados comparativos entre nalbufina y tramadol
- El grupo que recibió nalbufina experimentó una duración de la analgesia significativamente más prolongada en comparación con el grupo que recibió tramadol.
- En cada punto de tiempo, los signos vitales (PAS, PAD, frecuencia respiratoria y frecuencia cardíaca) de los 2 grupos fueron estadísticamente comparables.
- En general, el efecto analgésico de la nalbufina fue comparable al del tramadol, y la nalbufina tuvo una mayor duración de la analgesia.
- No hubo diferencia estadísticamente significativa en efectos adversos.
- La diferencia en las frecuencias respiratorias antes y después de la administración en los grupos de nalbufina y tramadol no fue estadísticamente significativa y no se observó depresión respiratoria.
Los opioides sistémicos en cirugía ambulatoria
Según la Sociedad China de Anestesiología, los opioides sistémicos administrados a pacientes sometidos a cirugía ambulatoria con anestesia general activan los receptores opioides y estimulan varios órganos. Esto a menudo resulta en náuseas y vómitos, prurito, retención urinaria, sedación excesiva e inhibición respiratoria. Por lo tanto, en principio, los opioides sistémicos no se utilizan para aliviar el dolor posoperatorio después de una cirugía ambulatoria. Las reacciones adversas y analgésicas de los opioides agonistas-antagonistas mixtos, como la nalbufina presentan un efecto techo.
La implementación de analgesia multimodal con AINEs puede reducir significativamente la dosis de opioides y las reacciones adversas, y puede usarse en el posoperatorio para controlar el dolor moderado después de la cirugía ambulatoria.
La nalbufina, un opioide mixto agonista-antagonista, se asocia con efectos secundarios más leves relacionados con el receptor μ. La incidencia de reacciones adversas asociadas con la nalbufina es relativamente baja en comparación con otros medicamentos opioides. Un metanálisis de ensayos controlados aleatorios mostró que la nalbufina tiene efectos analgésicos similares en comparación con la morfina y un mejor perfil de seguridad del fármaco con una baja incidencia de prurito posoperatorio, inhibición respiratoria, náuseas y vómitos. Además, los estudios han informado que el antagonismo del receptor μ por nalbufina podría reducir las reacciones adversas de otros opioides, como se observa en la combinación de morfina y nalbufina en analgesia controlada.
Este estudio muestra que la nalbufina a una dosis recomendada de 0,2 mg/kg es eficaz con un adecuado perfil de seguridad para el manejo del dolor después de una cirugía ambulatoria.
Bibliografía
Yu-jiao Guan et al. Pain management after ambulatory surgery: a prospective, multicenter, randomized, double-blinded parallel controlled trial comparing nalbuphine and tramadol. BMC Anesthesiology (2020) 20:204